Hoy vamos a hablar de un tema que nos puede afectar a todos: el despido siendo víctima de acoso laboral.
Si una empresa despide a un empleado, y no lo puede justificar con razones disciplinarias u objetivas, el despido se considera improcedente o incluso nulo. Pero, si el trabajador puede demostrar que su despido es por razones anticonstitucionales, como su sexo, edad, orientación sexual, o si se han violado sus derechos fundamentales, estaría siendo víctima de acoso.
En estos casos, un juez puede declarar el despido como nulo. Esto también se aplica si es una mujer embarazada o un representante de los trabajadores.
¿Qué sucede cuando un despido se declara nulo por acoso?
- Readmisión y salarios de tramitación: La empresa está obligada a readmitirte. Además debe pagarte los salarios que hayas dejado de percibir: desde la fecha del despido hasta el día en que se notifique la sentencia que declara la nulidad.
- Indemnización y salarios de tramitación: Si el despido se ha declarado nulo debido a situaciones de acoso laboral o sexual, puedes optar por terminar la relación laboral con derecho a una indemnización de 33 días por año de servicio (la indemnización prevista para los despidos improcedentes) y a los salarios de tramitación.
Por lo tanto, es crucial para las empresas poder justificar las causas del despido y revisar siempre la situación personal del trabajador afectado para evitar que el despido sea declarado nulo.
Nueva normativa
Por otra parte, es importante mencionar una nueva normativa que afecta a los autónomos. Desde la entrada en vigor de la Ley de Igualdad 3/2007 y su Real Decreto 901/2020, todas las empresas o autónomos empleadores, independientemente del número de trabajadores que tengan, están obligados a disponer del Protocolo de Acoso Laboral.
Este protocolo tiene como objetivo definir unas pautas que permitan identificar una situación de acoso en el negocio, ya sea moral, sexual o por razón de sexo.
reflexión final
Es importante recordar que la transparencia y la justicia deben ser los pilares de cualquier relación laboral. Un despido no es un proceso agradable para ninguna de las partes involucradas. No obstante, si se lleva a cabo de manera justa y por razones válidas, puede ser una parte necesaria de la dinámica empresarial.
Sin embargo, cuando se cruzan las líneas de la discriminación o se violan los derechos fundamentales, es fundamental que existan mecanismos legales para proteger a los trabajadores. Como hemos visto, estos mecanismos pueden incluir la nulidad del despido, la readmisión y la compensación económica.
Pero recuerda, la información es poder y tener a alguien de tu lado que entienda estos temas puede marcar una gran diferencia.
Por eso, en Gestoría Cantón, ofrecemos un servicio de asesoría laboral para ayudarte a navegar por estos temas complicados. Nuestro equipo de expertos está aquí para responder a tus preguntas, ofrecerte orientación y asegurarse de que tus derechos estén protegidos.